Pregunta 22: ¿Por qué tiene el Redentor que ser verdaderamente humano?
«Para que en su naturaleza humana pudiera obedecer perfectamente toda la ley y sufrir el castigo del pecado humano en nuestro lugar; y también para que pudiera compadecerse de nuestras debilidades.»
MAYO 29
Jesucristo sabe lo que es ser tentado en todas las cosas (Hebreos 4:15). Él asumió nuestra plena humanidad con todas sus luchas y debilidades. Esto trae gran consuelo al creyente. Nuestro Sumo Sacerdote, aquel que nos representa delante del Padre, se compadece de nuestras debilidades. ¡Podemos acudir a Él en cada circunstancia! Él jamás será indiferente ante el quebrantado de corazón. Por otra parte, Jesucristo jamás cayó en la tentación. Esto significa que, además de compadecerse, ¡Él es poderoso para salvarnos! Con su sacrificio en la cruz Él nos libera de la tentación, y por el poder de su intercesión – por el Espíritu – nos fortalece para crecer en santidad. ¡Gracias damos a Dios por Jesucristo!
Leer: Hebreos 4:14-16; 9:23-28.